Itzhak Perlman (nacido en Tel Aviv, Mandato Británico de Palestina)1 , el 31 de agosto de 1945. Violinista israelí-estadounidense. Es uno de los mejores y más famosos violinistas de la segunda mitad del siglo XX.
Contrajo poliomielitis a los cuatro años, viéndose más adelante en la necesidad de utilizar muletas para poder desplazarse, y por ello toca el violín sentado. Estudió en la Academia de Música de Tel Aviv, antes de mudarse a los Estados Unidos, donde se presentó a la audiencia norteamericana en el programa de Ed Sullivan en 1958. A los 13 años ingresó en la Juilliard School, en la que estudió con Ivan Galamian y Dorothy DeLay. Debutó en el Carnegie Hall como solista en 1963. En 1964 ganó la preciada Leventritt Competition, con lo que empezaría una prominente carrera.
Además de tocar y grabar música clásica, Perlman también toca jazz y klezmer. Recientemente ha comenzado a dirigir, tomando el puesto de director invitado en la Orquesta Sinfónica de Detroit. Perlman ha sido laureado con varios honores, incluyendo los del Centro Kennedy en el 2003.
11 comentarios:
Ecléptico el tío, ¿eh?
Fantástico.
Casa bien el tango con el violín.
El klezmer es algo que desconocía, o al menos que no conocía con ese nombre. Está muy bien.
Es la música folk judía, por así decirlo. Tocando como toca el amigo Itzhak, casa cualquier cosa, también es muy conocida su interpretación de la banda sonora de la lista de Schindler.
Sinceramente todo un genio.
Exquisita entrada y blog.
Saludos :)
Bienvenido al blog Jorge, gracias por tu amable comentario.
¡Qué voz tan bonita tiene este hombre!
Yo he tenido la suerte, desde bien pequeñita, de escuchar el sonido de su violín. ¡Dónde estarán esos discos de vinilo!
Bienvenida al blog y gracias por tu comentario.
Pues francamente es una gran suerte escuchar a músicos así desde pequeño, mi caso por desgracia fue más tardío.
Gracias, sí que es una suerte, mi padre tocaba el violín y el órgano, también había en casa un buen equipo de música para la época. Por eso, y porque disfrutaba escuchando música, podría decir que la música fue "my first love" que cantaría John Miles.
En mi casa no había precedentes musicales, y para mi tener primer tocadiscos tuve que convencer a mi madre acerca de un curso de inglés con tocadiscos incluído en el paquete, pero eso sí en cuánto comenzé a trabajar me compré el mejor equipo que había en el mercado.
Bueno, pues imagínate, lo primero que hice cuando tuve unas pocas de perras fue comprarme un buen equipo de música, un Inkel, que todavía conservo, menudos pedazos de bafles que tiene el condenado.
Y cómo suena, nada que envidiar a los equipos de ahora.
El mío fue un DUAL con motor de corriente contínua recién salido al mercado y unos altravoces que pesaban como 25/30 kg cada uno.
Publicar un comentario